martes, 14 de septiembre de 2010

Yogurt de soja casero


Lo siguiente que me cuestioné fue la leche. Toda mi vida he estado bebiendo leche de vaca. Al principio, durante mi infancia la leche que se vendía era leche fresca. Ésta duraba en la nevera dos o tres días. A lo largo de los años esta leche fue desapareciendo y empezaron a surgir los nuevos "cartones" de leche que duraban meses fuera de la nevera. Me hice la misma pregunta de siempre, ¿ por qué tomo leche de vaca y no de cabra, de almendras, de arroz o de soja ? Entonces las probé todas y la que más me gustó fué la de soja. Además, leyendo sobre esta leche vi que tenía mucha más propiedades que la de vaca y además era más digestiva.

Empecé bebiendo leche y luego probé el yogurt de soja. Sus propiedades son aún mejores que los de la leche. Los yogures del mercado tienen ingredientes no naturales por lo que me decidí  hacer el yogurt casero:


Para empezar necesitas una yogurtera, aunque también puedes hacerlo con una bolsa que tienen en los supermercados para productos congelados y una bufanda o algo similar. Yo me compré una yogurtera de 1 litro por unos 20 euros.
Esta es la foto.

 


 

En los supermercados busqué lo más natural a un precio no muy abusivo. Encontré en Mercadona la leche que aparece en la foto más abajo. Los ingredientes son naturales, agua de manantial, soja y sal. El precio sobre 0,90 euros. La verdad que el sabor es algo más extraño que el de otras marcas que tienen endulzantes y demás, pero si quieres alimentarte de forma natural lo mejor es ir acostumbrándote.



Necesitas un primer yogurt que no puede ser de ningún sabor, ni con trozos de frutas o cereales. Puedes escojer cualquiera pero piensa que este será a partir del cual se harán todos los demás.

La preparación es muy sencilla. Pones en la yogurtera la leche, el yogurt, lo remueves. Lo dejas unas 10 horas más o menos. Y ya está listo. A la nevera.

Yo lo tomo con frutas picadas o cereales ( preferiblemente avena ) y endulzado con miel o jarabe de arce.

Antes de terminartelo recuerda dejar un poco para volver a empezar.

Reflexiones antes de comenzar con el ejercicio físico.

El ejercicio físico es otra gran ayuda para ganar calidad de vida. Esto es sabido por todos nosotros, entonces ¿ por qué no lo realizamos habitualmente ?. Las principales causas son la pereza, la supuesta falta de tiempo y  disciplina, poca paciencia a la hora de ver resultados. Además, enfocamos el deporte y ejercicio más que a la salud al aspecto físico. Ambos son importantes, no cabe duda, sentirse con energía y verse guapo en el espejo son las principales motivaciones.

Una vez decidido es necesario tener una serie de pautas en cuenta:

-  La pereza. Para vencer a esta gran adversaria lo más conveniente es marcarse un programa factible. Con objetivos sencillos  y poco tiempo dedicado. Un programa para un mes y nunca permitirse faltar a la cita o no cumplir los ejercicios durante ese periodo. Pasado ese primer mes podemos cambiar el programa, pero nunca antes, porque muchas veces la que cambia el programa es la pereza.
Este punto tiene que estar muy claro antes de empezar e ir tachando los días uno a uno para disfrutar del placer de conseguir vencer a la pereza.

- Falta de tiempo. El ejercico físico es básico para nuestra salud, ¿ hay algo más importante que ésta ? Tus hijos, que en teoría son lo más importante, necesitan que tu salud sea buena y  tu energía máxima. Realmente, es posible que apuntarte a un gimnasio sea imcompatible con tu apretada agenda, pero seguro que podemos aprovechar algún momento del día para realizar ejercicio. Levantarnos 15 minutos antes, andar hasta el trabajo, movernos por la ciudad en bici, planificar los ejercicos en casa, etc, cada uno de nosotros debemos pensar como podemos acoplar el ejercico físico en nuestra vida sedentaria.


- Económico. No es necesario pagar un carísimo gimnasio, la ciudad está llena de sitios para realizar deporte. Por ejemplo en cualquier parque infantil puedes hacer dominadas, abdominales, flexiones de brazos y un sinfín de ejercicios. Busca por la red.

- Entretenimiento. Importantísmo es escoger algo que nos diverta y entretenga. No podemos realizar un deporte que nos aburra porque tarde o temprano nos cansaremos y lo abandonaremos. Dedica un tiempo a pensar lo que te realmente te gusta. Si no se te ocurre nada, piensa en lo que más te divertía en la infancia.

- Comunidad. Siempre es mejor realizar el ejercicio físico con compañeros o amigos. Te será más fácil y  ameno que practicar sólo. Busca entre tus amigos, compañeros de trabajo, en tu barrio o recurre a Internet. De todas maneras, si no encuentras a nadie no pasa nada, mucha gente entrena sola y obtiene muy buenos resultados.

- Alimentación. Quiero recordar la famosa frase "somos lo que comemos", si hacemos ejercicio y no cuidamos la alimentación el beneficio se verá muy disminuido. En el culturismo el 80% del triunfo se debe a la dieta.


Dedica un tiempo a pensar estos puntos y comienza, paso a paso, pronto te darás cuenta que estás más animado, tienes más energía y además tu cuerpo estéticamente mejorará.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Cuestiona y reconstruye tu salud

Internet nos está dando unas posibilidades enormes respecto a formar comunidades y esta web es eso lo que pretende ser; una gran comunidad que iremos componiendo con todos nuestros comentarios.


Comenzamos este blog con mucha ilusión, mucho amor y muchísimas ganas de aprender.



Vivo en una ciudad, como muchos de vosotros y con pocas posibilidades de emigrar al campo. Asfalto, prisas, contaminación, mala alimentación, estrés, poco ejercicio, falta de tiempo, etc. Estos son algunos de los motivos que disminuyen la calidad de vida de los urbanitas. Esta comunidad espero que nos ayude sino a solucionar por lo menos mejorar nuestra mente y cuerpo.



De cada uno de los puntos debemos analizar las causas, los cambios, los objetivos y visualizar lo máximo posible las soluciones. Temas como psicología, técnicas de relajación, hábitos de la alimentación, ejercicio físco y cualquiera relacionado será tratado con fuerza y paciencia por mí y espero que por todos vosotros.



Todos tenemos unas rutinas que nos enseñaron en nuestra infancia, que a su vez enseñaron a nuestros progenitores y así sucesivamente. Por lo tanto, no nos cuestionamos si esos hábitos se acoplan a nuestra manera de ser sino que nosotros nos acoplamos a ellos. Seguramente, en la mayoría de los casos son los más correctos, ¿ pero que pasa cuando no es así ?. Es hora de cuestionar si hay algo mejor para nosotros que lo que nos enseñaron. Repito, en muchos casos lo mejor será lo que aprendimos, pero es hora de empezar a abrir los cajones del cerebro, ver lo que contienen, si nos gusta volver a cerrarlos y si no pues volcarlos y llenarlos con lo que más convenga.



Muchas de las cosas que aprendimos nos la enseñaron nuestros padres, nuestra familia, nuestros amigos y profesores. Ellos lo hicieron con la mejor intención posible, con la experiencia y sabiduría que da la edad. Puede que en algunos temas se confundieran pero siempre pensando en ayudar. Por otro lado, están los agentes externos como los gobiernos, las empresas,la religión, ¿ quién nos dice que éstas nos invadieran los cajones del cerebro con la mejor intención posible ? ¿ quién me dice que no han rellenenado mis armarios con patrañas para, vulgarmente dicho, sacarme los cuartos ? ¿ cómo puedo saber si estos agentes externos no engañasen a los que me enseñaron de joven y que después ellos me lo intenten enseñar con la mejor intención ?



Pongamos un ejemplo de la alimentación como es el consumo de azucar. Existe una larga lista de edulcorantes tales como el jarabe de arce, la miel, la stevia, etc. ¿Por qué la mayoría de nosotros hemos elegido el azucar blanca para endulzar muchos de nuestros alimentos ? Seguramente, porque nuestros abuelos lo hicieron, y nuestros padres lo imitaron .Ahora nos toca a nosotros. No nos hemos cuestionado nada, simplemente hemos seguido la herencia de costumbres.

Ahora bien, navegando por internet en blog y foros sobre nutrición pude leer bastante sobre las malas consecuencias para la salud si consumimos azucar blanca refinada, puedes echar un vistazo por internet.



Por lo tanto las conclusiones que obtengo son las siguientes:

- el azucar blanca es la peor manera de endulzarte la vida.

- existen más productos similares mejores para la salud.

ASí que SIEMPRE debemos cuestionar si lo que nos enseñaron es lo mejor para nosotros.



Yo ahora tomo jarabe de arce y miel.

¿ Vosotros como endulzais vuestra vida ?
 
Pregúntatelo.